Ya casi estamos a punto de volver a la normalidad, aunque solo porque está a punto de empezar el año escolar porque por las temperaturas que estamos teniendo, quien lo diría. Bueno como estaba diciendo, volviendo a la normalidad también en la cocina y nuestras recetas se resienten con ello. Hoy vamos a preparar una Lasaña con carne, muy simple y sin muchas historias, para ello incluso vamos a utilizar pasta que no vamos a tener ni que hervir previamente. La verdad es que muchas veces rechazamos algunas recetas por lo laboriosas que son y la cantidad de tiempo que tenemos que perder en la cocina o simplemente echamos mano a congelado o precocinado como sucede con la Lasaña. Bueno pues vamos a empezar y veréis que rápido. Con la cantidad que os indico se pueden sacar perfectamente unas 6 raciones.
Vamos a empezar con la salsa de carne y tomate. Debería de ser una salsa boloñesa en toda regla, pero es mucho mas laboriosa y lo que queremos es fácil y rápido. Picamos una cebolla en cuadritos pequeños y ponemos con un chorrito de aceite de oliva a pochar. Cuando esta ya está en su punto le añadimos la carne mixta (cerdo/vacuno al 50 %) y sofreímos hasta que tome el color grisáceo que nos indica que ya no está cruda. Referente a la carne le he pedido al carnicero que la pasara dos veces por la trituradora, así queda más suelta y fina, pero eso ya es a gusto de cada uno. Cuando tengamos la carne también en su punto le añadimos el tomate triturado y mezclamos bien.
Acto seguido condimentamos con un poquito de sal, orégano, el dado de caldo de carne y dos cucharadas de tomate concentrado o en su lugar tomate frito también vale. Mezclamos bien y dejamos cocinar unos 20 minutos hasta que la salsa esté lista. Probamos como está de sabor y si es necesario rectificamos con otro poquito de sal. La salsa no debe quedar ni muy espesa ni muy liquida, os explico. Como vamos a utilizar pasta que no necesita cocción se va a hidratar con la salsa que le echemos, si está muy espesa tendrá poco liquido de donde coger y la pasta quedará dura. En cambio si la salsa está muy liquida, la pasta se hidratará bien pero quedará en el fondo del la fuente un exceso de liquido y la Lasaña no quedará compacta. Así que hay que buscar el termino medio.
En esta receta he utilizado la pasta que no necesita cocción, pero si queréis utilizar la pasta para Lasaña de toda la vida que hay que hervir previamente pues se prepara exactamente igual, solo hay que tener en cuenta que aquí la salsa si debe de estar espesa para que no quede ese fondillo de liquido al apartar y la Lasaña quede compacta.
Antes de montar la Lasaña, para que nos se seque la pasta, vamos a preparar una Bechamel con 750 ml de leche, si pincháis AQUÍ os lleva directamente mi post de como se hace la salsa Bechamel y ponemos también a precalentar el horno a unos 200 grados.
Ahora si que ya podemos montar nuestra Lasaña de carne. En primer lugar untamos a la bandeja de horno con mantequilla o margarina para que la pasta no se pegue en el fondo. Empezamos poniendo primero una capa con pasta para Lasaña y acto seguido cubrimos con una capa de salsa de carne con tomate, cortamos unas rodajitas de Mozarella y volvemos a cubrir con la pasta. Repetimos estos pasos una vez más y terminamos con una capa de pasta.
Acto seguido cubrimos con la salsa Bechamel y cubrimos con queso rallado. Metemos en el horno que ya estará caliente y dejamos gratinar. El tiempo depende de cada horno, yo no suelo poner el gratinador ya que suele gratinar muy rápido y si no, no queda ni uniforme ni tán doradito. Pero eso ya cada uno conoce su horno.
Una vez que ya se haya gratinado nuestra lasaña de carne hay que dejar que repose unos 10 minutos, no solo para que se enfrie un poco, si no para que a la vez se compacte un poco y al cortar el trozo para servir no se desmonte.
Espero que os haya gustado esta receta y os animéis a hacerla, está riquísima.
¡Hasta la próxima!
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