Hola a tod@s, hoy vamos a preparar Muffins Red Velvet, quizás pueda decir que son los Muffins que más me gusta de todos, no sé si es por su esponjosidad o por la combinación entre el bizcocho y el Frosting de queso, simplemente me parecen deliciosos. Son ideales para cumpleaños, fiestas, Navidades o simplemente para compartir en una merienda con la familia o con los amigos, el triunfo desde luego lo tienes asegurado.
Las cantidades de esta receta son para preparar justo 12 unidades ideal para que no sobren, de todas formas si queremos hacer más simplemente hay que duplicar o triplicar las cantidades, lo importante es que no te quedes con las ganas. Buenos pues vamos a ponernos en marcha con nuestros Muffins Red Velvet.
En primer lugar ponemos el horno a precalentar a 180 grados arriba y abajo.
1.) Empezamos preparando la Buttermilk al igual que hicimos el la tarta Red Velvet. Mezclamos la leche junto al zumo de limón y dejamos reposar durante 10 minutos.
2.) En un recipiente ponemos el aceite, el azúcar, el azúcar vainillado y el huevo, batimos hasta conseguir que la mezcla aumente su volumen y se vuelva blanquecina.
3.) En un recipiente aparte mezclamos los ingredientes secos la harina, el cacao y la 1/2 cucharadita de levadura química. Tamizamos para quitarles los grumos y vamos añadiendo a la mezcla de huevo en dos o tres veces mientras seguimos batiendo. Una vez tengamos todos los ingredientes bien incorporado y una masa homogénea, preparamos el segundo impulsor.
4.) Como es una cantidad muy pequeña la que vamos a preparar buscamos un vaso, bol o lo que tengáis a mano que sea pequeño. Echamos el bicarbonato y de golpe el vinagre y mientras esté en efervescencia lo añadimos de un golpe a la masa y mezclamos bien.
5.)Por último le ponemos el colorante rojo y volvemos a batir hasta que tengamos una bonita masa de color rojo.
6.) Sobre una bandeja de horno ponemos el molde con las cápsulas para los Muffins Red Velvet y los rellenamos a 2/3 partes. Metemos en el horno precalentado y dejamos que se horneen durante unos 30 min aproximadamente. Os recuerdo que el tiempo que os indico puede variar según cada horno. Lo mejor es que vayáis vigilando y cuando se vaya acercando el final del tiempo indicado, haced la prueba del palillo. Si pincháis el Muffin y sale limpio es que está listo, en cambio sí sale con masa pegada al palillo, aún queda un poco. Mientras tanto preparamos el Frosting de queso.
Frosting de queso
7.) En un recipiente batimos la mantequilla sin sal hasta que obtengamos una consistencia cremosa, tamizamos el azúcar glas para quitarle los grumos y volvemos a mezclar hasta que el azúcar y la mantequilla estén bien integrados.
Acto seguido le agregamos el queso crema tipo Philadelphia y volvemos a batir bien hasta conseguir un aspecto cremoso. Inmediatamente metemos en la nevera para que se vaya enfriando y tenga la solidez perfecta para manejar con la manga pastelera.
Decoración
8.) Entretanto ya se han horneado los Muffins Red Velvet, los hemos sacado y dejado enfriar sobre una rejilla antes de decorar con el frosting de queso. Es muy importante que estén bien fríos para que la crema no se derrita al adornar nuestros Muffins.
9.) Sacamos el Frosting de queso de la nevera, le ponemos a la manga pastelera la boquilla que más nos guste y decoramos. La decoración es algo muy personal, así que dejad volar vuestra imaginación y listos.
Están riquísimos, super tiernos y deliciosos , el triunfo está asegurado. Espero que os haya gustado y os animo a que lo preparéis. Hasta la próxima!
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